¿A quien hay que cuidar?

Una escena de hace varios años.
Había que armar las listas de candidatos. Yo era concejal. La discusión era si yo tenía que ser candidata a intendente o a diputada provincial.
En la primera posición se trataba de quién se sacrificaba. La campaña de candidato a intendente es de alta exposición pública, y con magros resultados (no esperábamos meter un concejal).
En la segunda era potenciar la imagen de quien tenía un cargo público, pelear ese lugar para nuestro distrito (que generalmente no encabezaba las listas seccionales), aunque tampoco había chances de meter un diputado provincial.
La discusión era realmente áspera. En un momento, el que llevaba la voz cantante de la primera posición le dice a los gritos a mi marido, que er a el que sostenía la segunda:
"Si yo fuera el marido de Alicia, la sabría cuidar mejor" ...
Esta escena se sigue desplegando ante cada ocasión importante a que nos enfrentamos. O ante cada situación conflictiva.
Cuidarme, descuidarme ... saber cuidarme sola.
Si yo fuera Ruperto en vez de Alicia, nadie hubiera pronunciado esta frase.
Sin embargo, seguramente, habría muchas personas, hombres y mujeres, dispuestos a cuidarlo, sin preguntarse demasiado lo que están haciendo.
Por supuesto, fui candidata a intendente. También los dirigentes de mi partido consideraron que era yo quien se tenía que sacrificar, ya que había tenido el premio de ser concejal.
Comentarios
Yo te cubro.